Ayer, a la puerta del Pleno del Ayuntamiento de la calle Montalbán, delegados sindicales de CCOO y UGT protestamos por la situación de bloqueo de la negociación colectiva y por la propaganda electoral que nuestra Alcaldesa, Ana Botella, ha comenzado a hacer manejando el superávit ficticio y la reducción de determinadas tasas e impuestos. Al igual que hace el Monarca Ilustrado Montoro con la devolución de nuestros derechos, la Alcaldesa comenzó ayer a postularse como candidata a la Alcaldía por el Partido Popular manejando a su antojo las Tasas e Impuestos municipales, anunciando la retirada para 2015 de la Tasa de Basuras que, como se ha repetido hasta la saciedad, fue imposición ilegal de Gallardón pues ya estaba incluida en el IBI. Mientras estas medidas se anuncian, la población madrileña que padece mayores dificultades por la crisis sigue sin recibir la imprescindible atención. Existen necesidades imperiosas de viviendas, de empleo, de atención a dependientes y mayores, incluso de alimentación en una parte numérica importante de la población infantil que vive en nuestra Ciudad. Pero nada de esto parece existir para nuestros gobernantes: 18 millones de euros no han sido gastados para la Ayuda a Domicilio; la Empresa Municipal de la Vivienda y el Suelo ha pasado de ocuparse en facilitar vivienda a los sectores desprotegidos a ser una entidad para la ingeniería financiera; el Ayuntamiento dedica únicamente 50 céntimos de cada 100 al Fomento para el Empleo; no existe Plan contra la Pobreza y el Hambre infantil… Los problemas reales, los que afectan a los más desprotegidos, siguen al margen de las preocupaciones de nuestra Alcaldesa.