El Ayuntamiento investiga a dos policías que escoltaron al pequeño Nicolás en Ribadeo
El coche en el que viaja el crío por las tierras de Lugo, que de tan feliz que va está grabando la situación con su teléfono móvil, lleva el típico pirulo azul en el salpicadero, propio de los coches camuflados donde se desplazan los tipos importantes. ¿Y quién va delante? Dos policías municipales de Madrid.
Y no dos policías cualesquiera. Son miembros del Cuerpo de Escoltas del Ayuntamiento. Es decir, son escoltas de verdad, y están ejerciendo como tales. Son, concretamente, un cabo y un policía, que habitualmente ejercen las labores de protección de concejales y otras personalidades del Consistorio.