Dancausa se niega a negociar
“Como funcionaria, considero que ya está bien de recortar, que es hora de
hablar sobre cómo mejorar el trabajo de los empleados públicos”. Éstas
fueron las palabras de Concepción Dancausa cuando el pasado 2 de enero
se presentaba a las organizaciones sindicales. Ayer, la concejala de
Hacienda, Concepción Dancausa, no pudo justificar la modificación del
Convenio 2012-2015. Ayer Dancausa demostró que no conoce el verbo
negociar. Ayer Dancausa mostró su verdadero discurso.
Éstas son las conclusiones principales que extraemos de las explicaciones
que ofreció Concepción Dancausa sobre las medidas del Plan de Ajuste
aprobado el pasado 28 de marzo: 30 años de negociación colectiva
arrojados por la borda sin justificación.
La Concejala de Hacienda acudió con desgana para en teoría ofrecer
explicaciones a la representación sindical. Ninguna novedad aportó. Según
ella, la deuda municipal es la causa de los recortes efectuados a la plantilla.
A no ser que sea la propia ignorancia del Equipo de Gobierno de Ana Botella
que en estos días se ha enterado de la existencia de la mala situación
económica del Ayuntamiento, nada nuevo aportaron como justificación real
de la suspensión de las Ayudas de Acción Social y del Premio por años de
servicio. Como quedó ayer claramente de manifiesto, argumentar que las
condiciones económicas del Ayuntamiento han cambiado en los tres últimos
meses es, claramente, mentir. La verdad es más sencilla: han decidido
cargar injustificadamente sobre las espaldas de la plantilla municipal y de la
ciudadanía el peso de los 7.300 millones de deuda.
Nada nuevo en el terreno de la situación económica-financiera, queremos
decir, porque donde sí existen novedades es en el de la política, por
desgracia, pues es ahí donde Concepción Dancausa se mueve. Con una
pretendida superioridad característica del que considera que puede gobernar
a su antojo pues enfrente sólo tiene súbditos ignorantes, anunció que los
Altos Cargos del Ayuntamiento cobrarán las Ayudas Sociales del primer
trimestre del año en curso. Y que, en efecto, Directivos con salarios
superiores a los del Presidente del Gobierno y coche oficial tendrán acceso a
las Ayudas residuales que se mantienen y al Abono Transporte. ¡Qué más
da que la justicia les haya dicho que no tienen derecho si estamos hablando
de los suyos! Y si quedaban dudas sobre cómo gobiernan, Concepción
Dancausa dejó bien sentado que no entra en sus planes negociar. Ni el Plan
de Ajuste, ni nada, pues con las manos vacías se presentó.
Sólo podemos calificar de lamentable el papel desempeñado por el antiguo
equipo de Personal que se mantiene como guardia pretoriana de Dancausa,
gestionando las migajas que la concejala les ofrece. Conocedores de la
falsedad de los argumentos y de la traición a la palabra dada, han decidido
mirar para otro lado y permanecer en sus puestos disimulando.
Para CCOO, la actitud de Concepción Dancausa es claramente autoritaria.
Nuestros actuales responsables no conocen el verbo negociar. La crisis, la
grave situación económica del Ayuntamiento es una excusa para mostrar su
autoritarismo y desprecio hacia el papel constitucional de las organizaciones
sindicales y del diálogo social. Y para adoptar medidas que perjudicando a la
mayoría protegen a los suyos. Estamos ante la versión castiza del “Tea
Party”, esto es, ante la derecha más extrema. Y para completar el manual
del perfecto autoritario, a las 7 de la tarde nos mandaron a la policía para
acallar la protesta. Sin argumentos, sólo quedaba el uso de la fuerza.