Alfonso del Álamo: “Mentiría si dijera que quiero que entren bomberas”
En declaraciones al diario El País, el Director General de Emergencias, Alfonso del Álamo, expone sin complejos, como les gusta decir a Esperanza Aguirre y Aznar, su ideología contraria a la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.de Bombero Especialista del Ayuntamiento (220 plazas) conforme al texto que Pedro Calvo, concejal del Área de Seguridad y Emergencias, había propuesto, sin modificar una coma, en contra de lo que CCOO había reivindicado. Las pruebas físicas previstas en las citadas Bases son de una dureza innecesaria, también para los hombres, lo que provocará que no se cubran todas las plazas convocadas. Para las mujeres, la consecuencia será que continuarán sin poder acceder al Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid. Sólo dos mujeres, a día de hoy, han conseguido incorporarse, y en la categoría de Bombero Conductor.
Al tiempo, ayuntamientos como Valencia, Santander, Barcelona, Cuenca, Las Palmas, Alicante, Fuenlabrada, Guadalajara, León, Salamanca, han ido estableciendo pruebas físicas exigentes, superables para personas físicamente preparadas, que no son ni atletas de élite ni superhombres, y que responden al principio constitucional de igualdad de oportunidades.
¿Acaso los bomberos y bomberas de estas administraciones son de segunda categoría? Nuestro Ayuntamiento, cargado de rémoras del pasado, se está quedando en el furgón de cola del conjunto de administraciones públicas. Continuamos sin Plan de Igualdad mientras la propaganda electoralista sobre conciliación la manejan a la perfección.
Alfonso del Álamo y Pedro Calvo, pero también Juan Bravo y el Alcalde Gallardón están obligados a rectificar y a hacerlo ya. Antes de que presentemos recurso contenciosoadministrativo que nos obligue dentro de tres o cuatro años a constatar la barrabasada cometida, pero sin margen entonces para desandar el camino recorrido.
¿Acaso los bomberos y bomberas de estas administraciones son de segunda categoría? Nuestro Ayuntamiento, cargado de rémoras del pasado, se está quedando en el furgón de cola del conjunto de administraciones públicas. Continuamos sin Plan de Igualdad mientras la propaganda electoralista sobre conciliación la manejan a la perfección.
Alfonso del Álamo y Pedro Calvo, pero también Juan Bravo y el Alcalde Gallardón están obligados a rectificar y a hacerlo ya. Antes de que presentemos recurso contenciosoadministrativo que nos obligue dentro de tres o cuatro años a constatar la barrabasada cometida, pero sin margen entonces para desandar el camino recorrido.