Estos días estamos celebrando dos efemérides que bien convendría no olvidar. Este año se cumplen 400 años de la muerte de Miguel de Cervantes y 42 del retorno de la democracia a Portugal, tras la ejemplar Revolución de los Claveles.

Por si alguien no se acuerda, aquel 25 de abril, un puñado de capitanes se alzó contra la muerte bajo la melodía compuesta por Zeca Alfonso y que en uno de sus versos decía aquello de «es el pueblo quien más ordena». Por si no sirviera esta referencia, el ilustre Cervantes, reflejó con su peculiar ironía, la burla a la que fue sometido Sancho Panza por parte de unos indecorosos duques. Ambos episodios ponen de manifiesto, no ya la legitimidad del pueblo para gobernarse, sino incluso su capacidad, como bien enseña Sancho en sus sentencias como Gobernador de la ínsula Barataria.

Llegados aquí, algunos no han entendido bien la dinámica de la democracia y lejos de asumir una legítima decisión popular que los ha apartado del gobierno, continúan en su perplejidad por no seguir mandándonos. Comportándose como duques caprichosos, concejales y concejalas del Partido Popular, creen haber cedido temporalmente su natural mando al populacho. Nada más lejos de la realidad. La ciudadanía madrileña decidió cambiar y esta vez no se encontraron tamayos que hicieran volver las cosas a su lugar.

La Sección Sindical de CCOO en la EMVS no acostumbra a entrar en cuestiones que no son de su competencia, pero por la gravedad del momento, de las ocurrencias que se van diciendo y el comportamiento comprobado, que afectan a nuestra empresa, parece necesario que esta vez sí lo haga...

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