No hay excusas
Con motivo de la celebración del 1 de Mayo, CCOO y UGT han elaborado un manifiesto conjunto en el que, entre otras importantes reivindicaciones, piden al Gobierno central, comunidades autónomas y a las formaciones políticas con representación parlamentaria que apoyen e impulsen las reformas y cambios necesarios para hacer posible que el aumento de la producción y de la riqueza beneficie al conjunto de la sociedad, y entre ella a la clase trabajadora, que ha sido especialmente castigada en la última década.
El crecimiento económico, advierten los sindicatos, debe llegar a todas las personas. Para ello, es preciso crear empleo estable y de calidad; derogar las reformas laborales, mejorar los salarios y reforzar las redes de protección social.![]()
Este cambio de políticas debe comenzar sin demora. Sin él la crisis nunca terminará para la mayoría social, para la clase trabajadora. Es una exigencia social, económica y democrática.
Desde 2008 muchos de los derechos de la clase trabajadora han sido eliminados, por el efecto directo de una intensa crisis y por unas políticas, mal llamadas de austeridad, que han aumentado la precariedad laboral, han reducido salarios y prestaciones sociales y han recortado derechos y libertades. Unas políticas que, en suma, han empobrecido a la mayoría social, que somos los trabajadores y las trabajadoras, y han aumentado las desigualdades, la pobreza y la exclusión social han aumentado
El crecimiento económico, advierten los sindicatos, debe llegar a todas las personas. Para ello, es preciso crear empleo estable y de calidad mediante la aprobación de un Plan de Choque; derogar las reformas laborales, mejorar los salarios y reforzar las redes de protección social.
En este sentido, en el manifiesto del 1 de Mayo, CCOO y UGT insisten en que es necesario devolver el equilibrio de fuerzas en la negociación colectiva, y exigen un SMI suficiente, estable y duradero en el tiempo (hay que llegar a un SMI de 1.000 euros a final de esta legislatura y garantizar que será siempre, al menos, equivalente al 60% del salario medio); una ley de igualdad salarial entre hombres y mujeres; la reforma del sistema de prestaciones por desempleo y la derogación de la reforma de las pensiones de 2013, entre otros aspectos.
Actualizado (Lunes, 24 de Abril de 2017 14:22)





















