Los desastres del Conde Duque
Un Museo cerrado desde abril de 2010 con más de 200 obras almacenadas y más de 170 artistas de diferentes épocas y tendencias a los que no podemos disfrutar. Este es el Madrid como destino turístico cultural que este gobierno municipal quiere. Para qué tanto Plan Estratégico de Turismo.
Dos salas del que fuera Museo de Arte Contemporáneo están ya reformadas pero sin uso, las obras artísticas que albergaba se apilan en un almacén; el Museo Municipal no cumple la normativa eléctrica ni contra incendios; en la Biblioteca Histórica hay goteras; en la Musical no se ha cerrado la cubierta y las salas de ensayo están sin insonorizar.
La concejala Milagros Hernández critica la ‘absoluta descoordinación’ entre las Direcciones Generales y Madrid Destino que “lleva a que nadie asuma la responsabilidad de este caos”
(Fuente: aquímadriz)
Un auténtico desastre.
Sólo así se puede calificar que, después de muchos años, incumplimientos de plazos y dinero, mucho dinero, de los madrileños y madrileñas el Conde Duque esté a día de hoy como está. En concreto como estaba el pasado día 4 cuando la portavoz de Las Artes del Grupo Municipal de Izquierda Unida, Milagros Hernández, cursó una visita a este centro cultural que debería ser de referencia en la ciudad y sólo lo es de dejadez y descoordinación entre departamentos.
Baste señalar que dos salas del que fuera Museo de Arte Contemporáneo están ya reformadas pero sin uso (se habla de que Madrid Destino quiere usarlas como oficinas), las obras artísticas que albergaba se apilan en un almacén, el Museo Municipal no cumple la normativa eléctrica ni contra incendios; en la Biblioteca Histórica hay goteras; en la Musical no se ha cerrado la cubierta y las salas de ensayo están sin insonorizar. Una enumeración de deficiencias que deberían sonrojar a cualquier equipo de gobierno que no fuera el de la alcaldesa Ana Botella.
Para él no hay límites. Hernández achaca esta lamentable situación “a una absoluta descoordinación entre las distintas Direcciones Generales implicadas y la empresa Madrid Destino que provoca que nadie asuma la responsabilidad de lo que está pasando; es una falta de proyecto global para el centro”. “Y no será, añadió, porque no las haya; alguien debería haber explicado hace tiempo cómo es posible mantener obras de arte amontonadas en un almacén cuando ya hay salas dispuestas para exposiciones o cómo es posible que en un centro municipal no se cumplan las normativas que la Administración exige a cualquiera que quiera hacer una obra”.